El sonido del mar con sus olas y los colores cristalinos del agua suelen relajar. Del mismo modo, el paisaje montañoso con su verde intenso y el trinar de las aves y el sonido de la brisa entre las hojas de los árboles, también ofrecen un descanso visual y sonoro.
Es normal que a la hora de planificar un viaje, principalmente sea estrés de vacaciones, se tenga la eterna duda al momento de elegir el destino. Algunos prefieren el mar y otros eligen las montañas.
Si algún un estudio científico, pasar una temporada en un lugar amplio y con un importante volumen de agua, reduce el estrés. Pero en este sentido se podría decir que un paisaje de montañas donde haya un lago, también reduciría el estrés.
La realidad es que, quien viaja por vacaciones, desea relajarse, disfrutar, descansar, y dejar el estrés de la rutina laboral de lado. Y eso puede conseguirse tanto en el mar como en la montaña. Lo realmente importante es saber elegir dónde hospedarse en cualquiera de esos dos destinos.
Lugares como el Hotel Cartagena Plaza, por ejemplo, posibilitan un buen descanso y también un buen disfrute cerca del mar. Termales del Otoño, en Manizales, ofrece también un buen descanso y un buen disfrute en un paisaje montañoso.
Ambas son opciones excelentes para relajar mente y cuerpo, cambiar las actividades rutinarias y obtener momentos inolvidables.